jueves, 10 de mayo de 2012

Estaré Bien

Déjame abrir mis alas, déjame volar lejos. Tal vez tropiece, sí, tal vez me pierda en el aire pero aprenderé. 

Seguiré conociendo al mundo, seguiré entendiendo que no es cómo lo imaginé. Pero tranquilo estará bien, siempre lo ha estado y yo siempre lo estaré. Sé bien que no soy la única aquí que tropieza ni la única que se eleva al viento para sentir, ni la única que sola se levanta. 

Sólo déjame ir, déjame ir muy lejos. Y sí, seguramente volveré, quizás para siempre, o seguramente me iré tan lejos que no querré regresar, pero estaré bien, siempre lo he estado y aquí o allá siempre lo estaré. 

Valeria Zuluaga Correa


Con la Sonrisa Falsa

Cuando crees tenerlo todo estás satisfecho, eso lo sabes, pero no sabes que puedes cubrirte con el triste y vengador hábito de la resignación. Dices dar la vida por tu verdadera felicidad pero conoces el inmenso abismo que separa a las palabras de la realidad. Si me quieres tanto como dices, ven por mí; o de otra forma yo jamás iré, igual que todo lo que siempre pides que nunca ha llegado a ti en un barco de papel. 

Si haces música, tu musa siempre bailará para ti pero si te quedas en silencio ella se quedará en tus sueños. Dormida, igual que tú, siempre dormida, con la sonrisa falsa que dibujaste en su rostro para obligarte a estar tranquilo. 

Yo te conozco, te conozco más que nadie y sé que vives para alejar de ti pensamientos tormentosos, llenos de ansiedad y nostalgia. Pero tranquilo, sólo debes tomar las riendas de tu vida y de tus sueños; lleva contigo el valor, el orgullo y todo lo que conoces de ti. Llévalos contigo como tu más preciado tesoro. No te abandones y sobre todo no abandones a esta nostálgica musa que hoy escribe para ti haciendo su trabajo de siempre: inspirarte con la sonrisa falsa que dibujaste en su rostro. 


  Valeria Zuluaga Correa

domingo, 14 de agosto de 2011

Toda la vida nos la pasamos queriendo conocernos y buscamos en la gente identificarnos para saber si depronto al mirarlos logremos conocernos a nosotros mismos desde el exterior.

Así que somos vulnerables a ser influenciados, a ser clones, a ser tal como pensamos que es esa otra persona que se parece a nosotros pero que por razones que desconocemos es mejor que nosotros mismos.

Valeria Zuluaga Correa
Voló, voló muy lejos de aquí, fue a la luna y regresó. Además cambió de forma, sólo que no se dio cuenta. Pero cuando despertó sonrió porque logró lo que tanto siempre deseó.

Valeria Zuluaga Correa
Ella sólo miraba su reflejo en la ventana mientras pensaba lo mucho que deseaba conocer otra realidad.

Estaba cansada de vivir como siempre y como nunca, estaba cansada de comportarse como los demás desearan para hacerla sentir mejor.

Quería irse lejos, escapar, correr sin cansarse, volar, sobre todo volar sin necesitar nada más y no tener que pensar ni cuestionarse sobre quién era y sobre qué era su vida.

Sólo quería sentir, mirar, escuchar sin detenerse a pensar ni un minuto sobre si esa era su única realidad.

Valeria Zuluaga Correa



Muchos dicen poder ver lo que somos, algunos incluso juzgan como actuamos, pero en realidad nadie, ni nosotros mismos conocemos por completo lo que somos.

Existe una gran diferencia entre ser y estar. Muy bien, tal vez el mundo logre ver donde estamos y nosotros podamos saber cómo nos sentimos. Pero ambas acciones son pasajeras y nuestra verdadera esencia en cambio, es eterna.

Podremos cambiar estados, sentimientos e incluso pensamientos. Pero jamás cambiaremos nuestra esencia, porque puede que ni siquiera a ella la conozcamos, es posible que por más que tratemos, nunca sepamos quienes somos.

Valeria Zuluaga Correa
Amor, inspirado e impulsivo amor. Se siente verdadero tras la primera palabra y luego se diluye en el olvido de algunos.

Amor que me sirves de musa, que impulsas mi imaginación y dejas correr en mí sensaciones nuevas y fugases. Eres tú mi razón de vivir, de soñar, reír, crecer y esperar; esperar paciente y esperanzadamente por ti.

Valeria Zuluaga Correa